Contratapa:
"... la redacción de una revista femenina, la industria de la evasión, las páginas tragicómicas de un consultorio sentimental. Unos hombres -obligados por su oficio a fingir la condición de mujeres y a asumir nombres exóticos- reciben consultas y expresiones de deseos que les envían lectoras (y aún lectores), proyectadas hacia la huida de sí mismas"
No se lo digas a nadie narra la trayectoria personal de un retoño de la más acomodada burquesía limeña, el cual descubre, en un contexto familiar donde el más brutal machismo y clasismo coexisten con la mojigatería, su propia identidad homoerótica, que le lleva, no sin algún episodio de ocasional heterosexualidad, a la espiral de la drogadicción, en el ámbito de los "coqueros" y al borde mismo de la prostitución masculina urbana. Sin embargo, el protagonista no es devorado por el mundo de la marginalidad, y, al aceptarse a sí mismo, convierte su conflictiva ruta, alejada ya de la droga, en un afirmación serena de la condición que le define.
Y un día Nico se fue...
Un relato desopilante, con un ritmo frenético y un romanticismo ingenuo y decididamente fuera de control, sobre una experiencia universal e inevitable: el desengaño amoroso.
¿Cómo te puede decir la persona a la que le dedicaste los últimos seis años de tu vida, el tipo al que considerás parte tuya, que la situación es insostenible, e irse así como así, de un día para otro, sólo porque no pasa nada? Debe ser algo que comió, es lo primero que piensa Osvaldo.
Nico se fue y Osvaldo está dispuesto a todo con tal de que Nico vuelva. Guardias nocturnas, súplicas, llantos, desplantes, golpes y estrategias tan desesperadas e inútiles como tiernas e hilarantes.